Como elementos singulares encontrados en este yacimiento datado entre el s. I y III D.C. destaca un taurobolio, o cabeza de toro labrada en piedra, relacionada con la advocación a la diosa Cibeles y Attis, un culto llegado desde el Próximo Oriente y asimilado por Roma.
Segun M. Luchaire , AHERBELTSE o AKERBELTZ ( Divinidad topica de la region de Luchon en la epoca romana) corresponderia al vasco "Aspaltza" o "Peña Negra".
Todavia hoy las cabras buscan los pastos y el refugio de las peñas de la cima de Aspaltza , pareciendo supervisar las excavaciones de este antiguo poblado romano que eligio este lugar para vivir y practicar sus cultos paganos.
PIEDRAS RITUALES PARA SACRIFICIO DE TOROS EN NAVARRA , ARAGÓN , SORIA Y EUSKADI; LOS "TAUROBOLIOS VASCÓNICOS"
En diversos puntos de Navarra , norte de Aragón , Soria , tierras de la Llanada Alavesa y Condado de Ayala , coincidiendo con zonas habitadas por los pueblos que las fuentes antiguas citan como vascones , han aparecido un grupo de aras de piedra que exhiben como motivo especial cabezas de toro en relieve.
Por las comarcas de Arsaos, cerca de Jaca, Bascunes y varias otras, pobladas en tiempos actuales y pasados por vascones, se han encontrado monedas vasco-ibéricas con toros.
Francisco Marco Simón de la Universidad de Zaragoza, escribe sobre los taurobolios vascónicos , diciendo que “ En diversos puntos del oriente de Navarra y del norte de la provincia de Zaragoza-dentro de la zona habitada por los pueblos que las fuentes antiguas citan como vascones- ha aparecido un grupo de aras de piedra que exhiben como motivo esencial cabezas de toro”. Aparecen en Sos del Rey Católico tres ejemplares de aras yen Uncastillo, se encuentran más.También aparecen cabezas de toro en Uxue, en Aibar, en Artajona, en la alavesa Laguardia , Amurrio y en el pueblo de Yanguas de la provincia de Soria.
FIESTA RITUAL DEL SACRIFICIO DEL TORO DURANTE EL EQUINOCCIO DE LA PRIMAVERA
Son fechas bonanza y felicidad!! ..... el Sol comienza a recuperar terreno a la oscuridad y, nos da energía suficiente para planear la futura cosecha y por consiguiente la abundancia.
Algunos estudiosos como Aita Joxemiel Barandiaran han considerado que los sacrificios de animales habituales estos días , eran dedicados a la propia Tierra , simbolizada tal vez en la figura de "LUR", que bien pudo preceder al culto de MARI.
Sigue siendo hoy en día tradicional asar productos de vacuno asados a la brasa o pinchados en un palo llamado "txitxi burruntzi", sobre un fuego purificador, valiendose de las propias ramas de este bosque al que se venera , pidiéndole que despierte y se regenere de nuevo para que vuelva a producir todo lo que necesitamos los humanos el proximo año.
El sacrificio animal (Toro) , en la prehistoria pudieron ser humanos ofrecidos a la madre tierra , posteriormente sustituidos por muertes de animales.
Uno de los númenes mitológicos vascos mas representativos de Orozko es el ZEZENGORRI de la Cueva de Atzulo , aunque no menos importante es el TAUROBOLIO o escultura romana del Sacrificio del Toro del Poblado Romano de Elexazar del s. III de nuestra era encontrado recientemente en el límite de Orozko con Ayala , lo que nos indica que el sacrificio del toro ya se celebraba en este municipio desde el siglo III y anteriores, relacionado probablemente con la advocación a la diosa Cibeles y Attis, un culto llegado desde el Próximo Oriente y asimilado por Roma ,fué admitido y asumido por los vascones que habitaron en la zona.
Llama la atención que esta imagen aparece en otros yacimientos como el de Uxue u otros poblados de Aragón . Investigaciones solventes aseguran que pueden representar a un Dios precristiano llamado LACUBEGI.
Los toros , bisontes y bueyes han sido idolatrados por nuestros ancestros desde las cavernas hasta no hace muchas decadas.
Desde la antigüedad, las excelencias atribuidas a la carne del toro, en muchas épocas pregonadas como luego veremos, eran tan variadas como las propias creencias que las sustentaban. Unas consideraban transmisible las propiedades del animal y por tanto las condiciones de fuerza, de potencia o de virilidad podían ser adquiridas por la persona que comiese la carne de este animal , siendo la ingestion de testiculos de toro ( ricos en testosterona ) muy habituales en los rituales diabólicos de magos y brujas.
El padre Manuel Larramendi , conocido historiador del s. XVII recoge en su libro sobre las ferrerías de Euskal Herria la costumbre ritual de sacrificar un buey al finalizar cada ciclo de produccion anual ;
"¿Dónde se matan bueyes mas cebones y se prepara mejor la cocina que en las ferrerías?
Los grandes señores van a veces a éstas sin otro quehacer que remojar el pan en los pucheros de los ferrones y comerlo después de haberse ablandado con aquel caldo mantecoso y dicen que en sus casas, a pesar de prepararlo con la mejor cocina y el mejor tocino, no logran guisar cosa tan rica y sustanciosa".
Cuentan en Orozko que la familia Axpegorta , ultimos regidores de la hoy extinta ferrería de Zubiaur , sacrificaban un buey para celebrar la finalizacion del año ferrón , invitando a todos los gremios que habian participado en la campaña a su fiesta y despidiéndolos hasta la siguiente época lluviosa de Otoño para volver a arrancar.
Ochenta quintales de vena de hierro se pagaron en el año 1.606 por un buey , mireral obtenido en su propia explotacion minera.
Otra leyenda de Orozko relata que cerca de la Cabaña de Altzagorta , en una cueva llamada Atxulo proxima al "Ojo de Atxulaur" vivia un ladrón que fue atesorando montones de oro en su habitacion. Falleció en Francia y algunos vecinos se interesaron en la localización de las riquezas para apropiarselas sin exito, pues un TORO DE FUEGO , guardian de la caverna , que lanzaba fuego por su boca y nariz, no permitía que entrara allí ninguna persona; era el alma del ladrón....Mas tarde , volvieron unos forasteros y depositaron en la cueva los huesos simulados del ladrón. Entonces pudieron sacar libremente cuanto oro tenia el difunto atesorado en aquel lugar. El toro no aparecio más.
También cuentan en el Duranguesado los Señores de Bizkaia, del linaje de Haro, renovaban regularmente el pacto de fidelidad de su familia con la Dama del Anboto (Mariurrika o La Reina Urraca de Navarra) , a quien consideraban su antepasada mítica, ofreciéndole la casquería de las vacas que sacrificaban en su casa. Este es el testimonio histórico más antiguo que conocemos sobre el culto y la creencia de Mari en Euskal Herria.
Así cuenta la leyenda el conde Pedro de Barcelos en el Livro de Linhagens (1340): "E cada que i é o senhor de Bizcaia (...), todo los de ventres das vacas que matam em sa casa, todo los manda poer em una peça fora da aldea, em ûa penha; e pela menhâa nom acham i nada" (...)
O sea, en traducción libre, "Y cada vez que allí está el Señor de Bizkaia (...) todos los vientres de las vacas que matan en su casa, todos los manda poner en una pieza, sobre una peña, y por la mañana no hallan allí nada" (...)
De ahi puede venir la relacion de Mari con los buitres , considerados como genios a su servicio , siempre vigilantes en las peñas de Lekanda en su morada de Supelegor o en el Paso del Diablo junto a la cueva de Anboto para que nadie penetre sin el permiso en las habitaciones de la Diosa sin sufrir castigo.
"La Era de Tauro (entre 6.000 y 4.000 años atrás) es un motivo fundamental en la mitología universal, lo cual es un indicio de que supone un «marcador» de una época histórica caracterizada por el inicio de la civilización tal como la entendemos hoy día (más en concreto, el comienzo de los grandes reinos e imperios, como por ejemplo Egipto o la Mesopotamia de los sumerios, y posteriormente de los acadios).
El fin de la Era de Tauro viene señalado, en la iconografía occidental, por el mito de Mitra dando muerte al toro celeste. Orión, representando a Mitra, acompañado de su fiel perro (Canis Majoris, constelación en la que encontramos a Sirio, la «estrella perro»), sacrifica al toro (la constelación de Tauro) con la ayuda de su fiel perro de presa . Esta representación es la más conocida de aquella corriente religiosa (una de las fuentes del cristianismo) que en tiempos de Roma era conocida como «mitraísmo».
La pervivencia de este culto al toro, como representación de la Era de Tauro, la encontramos en las diversas «tauromaquias» universales: en Creta (es célebre el fresco del palacio de Cnossos, donde unos jóvenes hacen cabriolas sobre el toro), entre los antiguos íberos (toros cazados a lazo, como en Liria), en Indonesia (Ratenggaro, Pulau Sumba) o en la España actual (la «corrida de toros»)."